jueves, 6 de enero de 2011

Gracias totales (repost)

Debutaste a los 18 años y por ese entonces eras Orteguita o El Burrito. En tu primer mundial tuviste que suplir la ausencia con aviso de otro gigante de este deporte. Saliste campeón de todo en el club que te vio nacer, o como vos decís, “el club de tus amores”. Jugaste en Europa y fuiste criticado de más por periodistas que nunca te supieron entender. Esos mismos, que le quisieron meter en la cabeza a la gente que del mundial Francia 98, nos quedamos afuera por tu culpa. En tu carrera enganchaste por derecha y por izquierda, para el centro o para afuera. Quebraste tantas cinturas que cualquiera que no sepa de fútbol pensaría que sos un defensor picapiedra. Volviste del viejo continente y tuviste los huevos de hacerle goles a tu querido River, de gritarlos, para que todo el mundo se de cuenta que no jugabas ahí por que los dirigentes no te querían. Luego de todo esto, se avivaron y te contrataron de vuelta. Desde ahí, muchos técnicos y por sobre toda las cosas, tu enfermedad, quisieron voltearte o hacer que no juegues más. De grande ya, tuviste tu retorno a la selección que te vio brillar durante casi 10 años. El técnico fue el mismo que suplantaste en aquel mundial del 94. Él, sin más que admiración, declaró: “Ariel esta más allá de todo. El público lo aplaudió por todo lo que le dio al país en tantos años.”.
Hoy te vas siendo El Burro, o como dice un amigo mio “Don Ariel Arnaldo”. Lo importante de esta tarde, o lo que realmente me emociona, es que los años pasan, los modelos de la remera van cambiando, tus compañeros no son más los mismos, pero no hay con que darle, que linda te que la numero 10.
Eternamente Gracias.

No hay comentarios: